Entrevista a Oriol Martínez, fundador y presidente de GasN2
Del 2 al 5 de junio de 2026, como parte de Expoquimia, tendrá lugar la 16.ª edición del Mediterranean Congress of Chemical Engineering (MeCCE), que promoverá el intercambio de conocimiento entre el mundo académico y el industrial, con el foco puesto en la innovación y la sostenibilidad. En línea con estos valores, la empresa catalana de impacto GasN2, recientemente certificada como B Corp, vuelve a ser Platinum Sponsor del congreso, convencida de que el apoyo de las empresas a este acontecimiento clave de la industria química es fundamental. El ingeniero químico Oriol Martínez, fundador y presidente de GasN2, considera que el MeCCE permitirá a sus participantes descubrir el potencial de las nuevas tecnologías que serán decisivas para acelerar la descarbonización del sector.
¿Qué le hizo decidirse a apoyar el congreso?
Hace unos años participé en el Congreso Mundial de Ingeniería Química como representante del Colegio de Ingenieros, y esa experiencia me permitió entender de primera mano la dimensión y la importancia de los grandes congresos. Fue tan enriquecedora que, posteriormente, decidí colaborar con el MeCCE. Cataluña es uno de los clústeres químicos más relevantes del mundo y, por tanto, Expoquimia debe convertirse en una feria de referencia internacional con un congreso de primer nivel.
Expoquimia y el MeCCE promueven tecnologías que impulsan el diseño de nuevas soluciones, especialmente en el ámbito de la sostenibilidad. En GasN2 creemos firmemente que el desarrollo del conocimiento es la base de todos los proyectos futuros, de la captación de nuevos clientes y también de la atracción de talento. La sostenibilidad solo se puede alcanzar mediante la innovación tecnológica, y compartir conocimiento con los mejores expertos en ingeniería química es una oportunidad que no se puede dejar escapar.
Por eso considero que, si como empresa participas, crees en ello y obtienes un retorno económico, también es esencial contribuir. Si las empresas no apoyamos este tipo de iniciativas, los espacios de conexión entre industria y academia corren el riesgo de desaparecer.
Un eje estratégico esencial para GasN2 es la sostenibilidad. ¿Qué peso tendrá en este congreso?
Para las nuevas empresas —aquellas que hemos nacido en un contexto en el que el cambio climático nos recuerda cada día que hay que actuar de manera diferente—, trabajar por la sostenibilidad es un factor clave de éxito. De hecho, este compromiso nos ha valido la reciente certificación B Corp, que reconoce a las empresas que cumplen los más altos estándares sociales y ambientales.
Si solo te preocupa ganar dinero, pronto dejarás de ser relevante en el mercado, dejarás de vender y, en consecuencia, acabarás desapareciendo como empresa. Las compañías que no sean sostenibles simplemente no tendrán futuro.
Por eso, todos los conocimientos que se debatan y se destaquen en el congreso deben estar orientados a desarrollar tecnologías que hagan posible esta sostenibilidad.
Esta colaboración está muy alineada con la misión y la visión de su empresa…
Sí. En los cimientos de GasN2 el núcleo es el desarrollo de nuevas tecnologías más eficientes y sostenibles; este es nuestro eje estratégico.
Sabemos que nuestros clientes no solo deben avanzar en la reducción de emisiones de CO₂: deben llegar a dejar de emitirlas. Por eso, nos presentamos no como un proveedor de soluciones, sino como un aliado estratégico que les acompaña en el camino hacia ser cero emisores de CO₂.
Además, trabajamos para que las empresas con las que colaboramos vayan más allá de cumplir los requerimientos legislativos y orienten su visión hacia procesos más sostenibles a escala global.
¿Las empresas son conscientes de ello o aún hace falta mucha pedagogía en este sentido?
Todavía hace falta mucha pedagogía. Hay empresas que ya son conscientes de la necesidad de cambio, pero muchas otras aún no disponen del conocimiento ni de los recursos para aplicarlo. El día a día operativo a menudo no se lo permite y, quizás, tampoco cuentan con una visión estratégica de futuro.
Aquí es donde el congreso y la feria juegan un papel clave: permiten llegar a los auténticos decisores estratégicos. Por eso hacemos una apuesta tan importante por Expoquimia, donde presentaremos diversos casos de éxito relacionados con la reducción de emisiones de CO₂. Hoy en día, las empresas donde hemos instalado nuestros equipos —prácticamente todas en Cataluña— ya han conseguido ahorrar 10.000 toneladas anuales de emisiones de CO₂.
¿Qué proyectos relacionados con el congreso tienen en curso y cuál es su impacto en la industria?
En primer lugar, ofrecemos soluciones para el mercado de consumo de gases como nitrógeno, oxígeno y mezclas especiales. Generalmente trabajamos con un modelo de alquiler de equipos, de manera que el cliente no tenga que hacer una gran inversión inicial. Esta fórmula permite una democratización de la sostenibilidad, porque facilita que también las empresas pequeñas puedan incorporar tecnologías más limpias aunque dispongan de menos recursos.
Nuestra segunda línea de negocio es el frío y la ultracongelación. En este ámbito intervienen otros gases con un impacto ambiental significativo, a menudo olvidados cuando se habla de efecto invernadero. Tenemos tendencia a pensar que el problema se limita al CO₂, pero muchos otros gases también contribuyen. Nosotros implementamos soluciones de frío industrial con tecnología propia que evitan el uso de HFCs y utilizan refrigerantes más sostenibles y menos contaminantes. En este sentido, nuestra tecnología estrella que presentaremos en el congreso es una bomba de calor de alta temperatura capaz de alcanzar hasta 210 °C, un hito que actualmente ninguna otra empresa en el mundo es capaz de ofrecer.
¿Esto ya lo están implementando, hay empresas que han probado este producto?
Sí, ya lo hemos probado y funciona. De hecho, disponemos de acuerdos estratégicos con varias empresas y, durante los próximos meses, los concretaremos para poder presentarlos como casos de éxito durante el congreso.
Hay que tener en cuenta que, entre las empresas químicas que asistirán, prácticamente todas utilizan calderas. Por tanto, se trata de una solución global, con una demanda creciente, especialmente en un contexto donde los gases fluorados están cada vez más restringidos y el coste de emitir CO₂ no deja de aumentar.
¿Cuáles son sus expectativas de participación en el congreso?
Vamos para debatir conocimiento y analizar el estado actual de las ideas y proyectos que aún se encuentran en el ámbito académico. Aunque también queremos acercarnos al sector empresarial, la realidad es que participa un gran número de profesores universitarios con un bagaje de conocimiento inmenso, y hay que aprovechar esta oportunidad para ponerlos en contacto con el mundo de la empresa.
Otro gran valor del congreso es el talento emergente: muchos estudiantes presentan sus trabajos, lo que convierte el evento en un espacio privilegiado para identificar profesionales con proyección, porque, al final, las empresas las hacen las personas.
En definitiva, cuantos más estudiantes presenten proyectos y más empresarios asistan para buscar e intercambiar conocimiento, más enriquecedor será el congreso para todos.
¿Cómo fortalece esta colaboración su posición en el sector?
Participar en el congreso nos permite generar nuevas ideas, impulsar proyectos e intercambiar conocimiento con otros actores del sector, al tiempo que nos da una visión clara de hacia dónde evoluciona la tecnología. Esta interacción nos ayuda a avanzar hacia soluciones más innovadoras y eficientes para los clientes, reforzando su confianza en nosotros.
Como empresa, nuestra misión es liderar el desarrollo tecnológico y sostenible, y esta es la mejor carta de presentación tanto para los clientes como para el talento que queremos atraer.